flat coated retriever

Flat coated retriever, conoce la raza, consejos

El Flat Coated Retriever o Perro cobrador de pelo liso es una raza de perro de caza procedente del Reino Unido. Fue desarrollado como un perro perdiguero tanto para trabajar en tierra como en el agua como perro cobrador.

El Flat-Coated Retriever es un excelente nadador (su piel aceitosa le hace sentirse como pez en el agua), cualidad por la que en la caza se ha utilizado para cobrar básicamente aves acuáticas. Por otro lado, gracias a su excelente olfato, esta raza también se ha usado para la búsqueda y rescate, para el rastreo y para la detección de drogas.

Antiguamente, todos los perros de caza que se utilizaban para cobrar eran llamados “Retriever”.  Así pues, los Spaniel, los Setter o los Bracos estaban incluidos en el mismo saco. La mayoría de los cruces se hacían en función de las características que más destacaban en cada perro y de esta manera, se intentaba crear a un perro superior. Debido a los cruces un poco al azar, el origen de estos perros es incierto. Pasados estos años de “descontrol”, se conoce que hacia 1850 ya apareció el que más tarde sería conocido como Retriever de Pelo Liso.

Carácter – Convivencia – Comportamiento – Educación:

El Cobrador de Pelo Liso es juguetón, equilibrado, amable, limpio, extrovertido y sociable. Este carácter lo convierte en un buen perro de compañía y en un gran amigo de los niños ya mayores, aunque ante todo, es un perro de trabajo. Disfruta con todo tipo de actividad, en especial la acuática.

Lo más apreciable es que el Flat-Coated Retriever madura muy lentamente física y emocionalmente y no supera su naturaleza de cachorro hasta los tres o cuatro años de vida. El adiestramiento temprano del cachorro es esencial y se recomienda encarecidamente, aunque debe practicarse en sesiones breves y alegres, ya que su naturaleza sensible se resistiría a la educación severa. Se trata de «alumnos» listos y llenos de ilusión que aprenden rápida y fácilmente, pero que también pueden volverse tímidos y miedosos si se les trata con dureza. Durante el adiestramiento necesitan un manejo suave aunque firme y, sobre todo, un enfoque individualizado. Deberían potenciarse el comportamiento adecuado y las buenas maneras mediante lecciones cortas, positivas y alegres. Se pueden prevenir los malos hábitos con la supervisión, las atenciones y el ejercicio adecuados.

El Flat-Coated Retriever es un perro activo que se adapta bien a la vida urbana. Necesita un considerable ejercicio y actividad diarias con los miembros de la familia. Se trata de un perro limpio, lleno de energía y alegre que conserva su aspecto joven hasta bien entrado en la ancianidad. Aunque es un típico perro cobrador amable, afectuoso y que siempre está dispuesto a jugar, tiene un nivel de actividad mayor que un Golden o un Labrador Retriever. Un Flat-Coated Retriever bien criado tendrá mucha energía pero no será hiperactivo. Su necesidad de ejercicio es enorme y sin ello se convertirá en un perro destructivo y difícil de controlar. Incluso con el ejercicio suficiente seguirá siendo exuberante y entusiasta y siempre estará listo para participar en alguna nueva actividad con usted. La palabra «sedentario» no forma parte de su descripción.

El Flat-Coated Retriever necesita, claramente, estar con la gente e interaccionar estrechamente con los miembros de su familia. Quedará frustrado si se le aparta de ellos y no medrará si se le recluye en una caseta en el jardín. Debido a su alto nivel de energía, los Flat-Coated Retriever se aburren con facilidad y pueden volverse «creativamente destructivos» si se les deja demasiado tiempo sin nada para mantenerles ocupados. Al igual que otros perros cobradores son perros muy orales que parecen obsesionados con tener algo en sus bocas, para llevarlo de acá para allá, durante todo el tiempo.

Los Flat-Coated Retriever como raza no son buenos perros guardianes. Quizá sean más perros de aviso que guardianes y ladrarán a los extraños, pero rara vez les morderán. Es, básicamente, un compañero que no parará de mover la cola y que tenderá a mostrarse amigable con todo el mudo: animales y personas. Aunque es bueno con los niños, puede ser un peligro al lado de los niños pequeños debido a su euforia. Su actitud alegre y su cola que no para de moverse pueden, inintencionadamente, asustar e incluso dañar a los niños pequeños, que podrían resultar fácilmente heridos por 32 o 36 kg de entusiasmo canino. Un saludo común por parte de un Flat-Coated Retriever es saltar encima de la persona para darle un alegre «hola» y un lametón en la cara mientras la trufa de él toca su nariz, lo que supone una conducta que pocos adultos aprecian o consienten.

Aunque el Flat-Coated Retriever se muestra entusiasmado con el trabajo, puede ser muy tozudo, especialmente si se le trata severa o injustamente (en su opinión). Necesita unos buenos fundamentos de obediencia y que éstos le sean mostrados a una edad muy temprana para convertirse en un perro civilizado y en un compañero educado.

Como regla general, se considera que los Flat-Coated Retriever son demasiado activos para el trabajo como perros lazarillo para los invidentes, como perros-oído para la gente con problemas auditivos o como animales de servicios para las personas con minusvalías físicas. Los mejores resultados se han conseguido con Flat-Coated Retriever que han sido adiestrados para ayudar a amos con una capacidad visual reducida que ya conocen y quieren a su perro.

Los Flat-Coated Retriever, al igual que otras razas cobradoras, son conocidos por su excelente olfato. Como «super-olfateadores» que son, se han abierto camino en la mayoría de las tareas que implican rastrear y olfatear. En algunos países esa raza participa en pruebas de rastreo reglamentadas y obtiene títulos en competiciones formales.

Los Flat-Coated Retriever que han triunfado en las pruebas de rastreo son también utilizados, en algunos países, para seguir el rastro a animales heridos, como el ciervo o el alce, lesionados en accidentes de tráfico o durante una cacería. En Noruega está prohibido cazar ciervos o alces sin la presencia de un perro oficialmente inscrito como rastreador.

En varios países, los Flat-Coated Retriever también siguen el rastro para encontrar a personas perdidas, heridas y que se encuentran sepultadas por escombros. Se ha entrenado a muchos de estos perros para el trabajo en casos de avalanchas y son muy buenos cuando se trata de encontrar a personas enterradas bajo la nieve. Estos perros trabajan en condiciones extremas: su capacidad para trabajar entre la nieve y bajo unas gélidas condiciones climáticas subraya todavía más su capacidad olfativa.

Los Flat-Coated Retriever de búsqueda y rescate también ayudan en la localización de víctimas de desastres naturales como terremotos y en atentados terroristas en lugares en los que han explotado bombas.

No es sorprendente que los Flat-Coated Retriever hayan probado ser excelentes perros detectores de drogas. En Noruega, en un determinado momento de los años 90, esta raza representaba la tercera parte del total de perros aprobados para la detección de drogas de ese país. Aunque en Noruega se considera que esta raza es hiperactiva, se cree que esta característica contribuye a la excelente capacidad de trabajo de la misma.

Cuidados y Salud:

El Retriever de Pelo Liso está hecho para la vida al aire libre, necesita hacer ejercicio cada día para gastar toda la energía que le sobra y evitar el sobrepeso. Se adapta bien a vivir en la ciudad pero una vida únicamente urbana y sedentaria podría alterar su carácter.

Aunque el Flat-Coated Retriever tiene una doble capa y pierde pelo en todas las temporadas, su pelaje es más liso y tiene menos flecos que el del Golden Retriever, que tiene mucho pelo. Así pues, requiere un menor acicalado. El cepillado frecuente (enfatizamos la palabra «frecuente») mantendrá su pelaje en buen estado y hará que la muda se reduzca al mínimo.

El Cobrador de Pelo Liso no tiene enfermedades específicas de su raza pero se ha detectado que puede padecer displasia de cadera o luxación de rótula.

Historia:

A lo largo de la historia, el emparejamiento entre el cazador y el perro de caza ha evolucionado de acuerdo con las condiciones de caza que hubiera en cada época. Antes del siglo XIX, las armas antiguas dictaban el tipo de perro utilizado para localizar y abatir a las aves de caza y a otros animales. La evolución de las armas de fuego cambió para siempre la naturaleza de la relación en la caza entre el hombre y el perro.

Con sus armas mejoradas, que le permitían mayores distancias y ventajas para abatir muchas piezas del campo y aves acuáticas, el cazador también necesitaba un perro cobrador mejorado que localizara y cobrara estas piezas cazadas. El uso de las armas de fuego requería de un perro que se pudiera controlar y que encontrara las piezas dentro del alcance de las escopetas.

Durante ese periodo, se utilizó el nombre «retriever» (perro cobrador) para cualquier perro de caza que llevara a cabo este cometido, más que para referirse a una raza canina concreta. Así pues, cualquier Braco, Spaniel o Setter que cobrara la caza abatida por su amo era considerado como un perro de cobro. Los cazadores utilizaban varios de estos perros de caza para perseguir a las piezas y ganarse su sustento, y la mayoría de los cruces estaban pensados y se llevaban a cabo de acuerdo con las habilidades de cada perro concreto. Simplemente cruzaban los buenos perros de cualquier origen con otros que fueran también buenos para dar lugar a perros de caza superiores que tuvieran ciertas cualidades como un buen olfato, valentía o afinidad con el agua, y no potenciaban apenas un tipo o raza concreta.

Debido a este proceso de selección al azar y a la falta de registros de cría en los albores del tiempo, la secuencia exacta del desarrollo de las razas cobradoras de caza se ha perdido. Así pues, reina la confusión sobre el origen exacto de la mayoría de estas razas. La excepción es el Golden Retriever, que fue desarrollado por una persona cuyos esfuerzos en la cría se conservaron para la historia canina gracias a los registros de su criadero.

Hacia 1850, a medida que surgían y se desarrollaban los varios tipos de perros cobradores, apareció en la península del Labrador el Perro de Aguas de St. John, como perro cobrador sobresaliente que poseía una inteligencia, resistencia y buena salud excepcionales. Se cree, en general, que estos perros de la península del Labrador fueron cruzados con perros de tipo Setter para dar lugar al Wavy-Coated Retriever (Cobrador de Capa Ondulada), que más tarde fue rebautizado con el nombre de Flat-Coated Retriever (Cobrador de Capa Lisa).

El Wavy-Coated Retriever fue conocido como un perro sensacional que combinaba la capacidad de trabajo con la elegancia y la belleza. Esta elegancia no se perdió con los cazadores, a los que también les gustaban los perros hermosos, y antes de que pasaran dos décadas se fijó el tipo de Capa Lisa (Flat-Coated), que era atlético y vivaz, dando lugar a un perro con una doble utilidad que actuaba en el campo y tenía potencial para los certámenes caninos de belleza.

El primer Flat-Coated Retriever fue expuesto en 1864 en dos categorías en un certamen celebrado en Birmingham. Los vencedores fueron Wyndham (propiedad de Mr. T. Meyrick) y Music (propiedad de lord Paget), que fueron los dos primeros Flat-Coated Retriever que iniciaron el camino ascendente de esta raza en ambos campos de las competiciones caninas.

Hacia principios de los años 1870, el versátil Flat-Coated Retriever llamó la atención de Mr. Sewallis Evelyn Shirley, un importante criador y aficionado que crió excelentes perros con doble utilidad bajo el afijo Ettington.

Mr. Shirley fue, quizás, más conocido por ser el fundador del Kennel Club de Inglaterra en 1873, del que fue su primer presidente. Su experiencia y su asociación con el Kennel Club aseguró a esta raza de doble objetivo su calidad en los certámenes de belleza, además de su valía como perro de trabajo en el campo.

Se cree que Mr. Shirley utilizó a los Perros de Aguas de St. John, a Spaniel de aguas y posiblemente a Scotch Collies para estabilizar y fijar el tipo de la raza Flat-Coated Retriever. También empleó al Labrador Retriever en algunos cruces, usando a perros disponibles de dos importantes criaderos de esta raza (Malmesbury y Buccleugh). Los Flat-Coated Retriever de Mr. Shirley eran, principalmente, de color negro o hígado, aunque en esos tiempos se consideraban como aceptables otros colores. Durante ese periodo, la gente todavía se refería, a esta raza, con el nombre de Wavy-Coated Retriever.

Otros dos criadores importantes de finales del siglo XIX sucedieron a Mr. Shirley para fijar y preservar el tipo del Flat-Coated Retriever. Mr. Harding Cox siguió el ejemplo de Mr. Shirley y dio lugar a Flat-Coated Retriever que fueron famosos por sus elegantes cabezas y su similitud en cuanto al tipo. Otro protector de la raza, el coronel Cornwall-Leigh, también fue célebre por sus considerables contribuciones.

Mr. Reginald Cooke (1850-1951), otro aficionado influyente que era conocido por su afijo Riverside, tuvo Flat-Coated Retriever durante más de 60 años. Preocupado por la conservación de las habilidades de caza de los perros que participaban en los certámenes de belleza, Mr. Cooke tuvo éxito en las pruebas de campo además de en las exposiciones de belleza y sus esfuerzos ayudaron a que la raza conservara su naturaleza como perro de doble utilidad.

Mr. Cooke era un buen competidor, determinado a criar y a hacer campaña a favor del perro de la mejor calidad posible. Se trataba de un formidable presentador así como de un expositor, y durante su carrera su récord en las pruebas de campo fue la de 15 Primeros lugares, 10 Segundos, 11 Reservas y 21 Certificados de Mérito (Certificate of Merit). También obtuvo 349 CC (Certificados de Desafío o Challenge Certificates) y 130 CC Reservas, además de criar a muchos campeones, entre los que se pueden incluir a Toby of Riverside y Grouse of Riverside, que se convirtieron en campeones duales.

Mr. Cooke conservó registros de cría detallados que se guardan como parte de la historia de esta raza. Apasionado en su promoción de lo mejor para la raza, también escribió tres pequeños opúsculos para instruir a los neófitos en la raza.

La dedicación de Mr. Cooke, de Mr. Cox y del coronel Cornwall-Leigh para con el Flat-Coated Retriever ayudó a que la raza fuera una de las favoritas entre los amantes de los perros de pura raza. Hacia finales del siglo XIX, el Flat- Coated Retriever era famoso por su belleza y sus habilidades, además de por ser una raza que tenía muy fijados su calidad y su carácter. Especialmente conocidos por sus movimientos elegantes, su aspecto pulcro y su expresión agradable, estos perros se convirtieron en los favoritos tanto en las pruebas de campo como en las exposiciones caninas de belleza.

High Legh Blarney, propiedad del coronel Cornwall-Leigh, fue un excelente competidor durante su carrera. Cuando el coronel falleció en 1905, sus perros fueron subastados. Mr. Cooke había quedado tan impresionado con Blarney que pujó para hacerse con él. El agente de Mr. Cooke consiguió al perro por 200 guineas, un altísimo precio en aquellos tiempos, pero Mr. Cooke recuperó su inversión en sólo dos años con las tarifas de semental de este perro.

Blarney continuó con sus victorias y no fue batido en los certámenes de belleza hasta su muerte, a los 11 años de edad. Usado frecuentemente como semental por sus excelentes cualidades, dejó una huella duradera en la historia de la raza.

El éxito de Mr. Cooke con Blarney influyó, sin duda, en sus planes futuros y pagó de nuevo 200 guineas por Ch. Black Quilt. Lord Redesdale siguió su estrategia y compró a una hembra, Ch. Black Queen, por 145 guineas. Aunque el Flat-Coated Retriever parecía tener gran demanda, los criaderos pequeños y los aficionados de menor poder adquisitivo no pudieron competir dados esos altísimos precios que sí podían pagar los mayores y más influyentes criadores de esos tiempos.

Más o menos en esa misma época, la popularidad del Labrador y del Golden Retriever estaban en alza y las inscripciones en el libro de orígenes del Flat-Coated Retriever estaban comenzando a disminuir. La primera guerra mundial afectó aún más al mundo de los aficionados a los perros y la mayoría de las razas sufrieron un descenso en perros disponibles. Las inscripciones de Flat-Coated Retriever fueron 438 en 1924 y siguieron cayendo durante la segunda guerra mundial. En esos tiempos sólo tenían perros de esta raza un pequeño número de cazadores acaudalados que podían permitirse salir a cazar con sus perros y presentarlos también en los certámenes caninos de belleza, si les apetecía, conservando así la doble utilidad de esta raza. Los Flat-Coated Retriever siguieron siendo populares entre los guardabosques, a los que les gustaba el tipo y el carácter que habían sido fijados en la raza.

Hacia 1945, la influencia de los años de la guerra y el número creciente de Labrador y de Golden Retriever habían afectado a la popularidad del Flat-Coated Retriever. Reaparecieron en 1946 en una Exposición no Puntuable celebrada en Leeds, con Mr. Birch como juez. Atherbram Nobbie (macho propiedad de Mr. Phizacklea) y Claverdon Jet (hembra propiedad de la Dra. Nancy Laughton) obtuvieron los primeros Certificados de Desafío. Es importante advertir que la mayoría de los Flat-Coated Retriever que eran expuestos en los certámenes de belleza también se dedicaban a la caza de aves.

En 1946, se registraron 94 montas de Flat-Coated Retriever en el Kennel Club de Inglaterra. Claverdon Jet obtuvo dos CC más y se convirtió en la primera perra campeona tras la guerra. La Flat-Coated Retriever Association celebró la primera prueba de campo tras la guerra en 1947 con un Premio para Todas las Edades (All-Aged Stake) que tuvo como vencedor a Greenfield June.

Al año siguiente (1948) tuvo lugar la primera Exposición Canina de Belleza Crufts (Crufts Dog Show) tras la guerra. Atherbram Nobbie y Claverdon Jet se volvieron a alzar con la victoria, ganado sus CC con el juez Mr. E. Turner. En este mismo año, la Flat-Coated Retriever Association celebró su primer Premio de Prueba de Campo para Todas las Edades, que ganó Maesmynan Patricia.

Las contribuciones de Mr. Phizacklea durante esos años posteriores a la guerra nunca podrán agradecerse lo suficiente. Era un criador experimentado desde principios de los años 20 e hizo cruces, de forma regular, fuera de sus líneas, trayendo siempre a animales excelentes en las pruebas de campo para ampliar y reforzar su línea y dar lugar a ganadores de doble utilidad que tuvieran, además, actuaciones de una calidad constante. Su línea Atherbram dio lugar tanto a perros negros como de color hígado.

Con la raza en franco declive, introdujo o formó una línea de cría utilizando como base a Rettendon Dido y a los ganadores de pruebas de campo Windle Don, Windle Peggy y FT Ch. Elwy Mary. El programa de cría de Mr. Phizacklea dio lugar a Jet, propiedad de la Dra. Laughton, a su excelente hermano Atherbram Monty y a la mayoría de los animales de esta raza comprados después de la segunda guerra mundial.

El afijo Atherbram fue transferido a su sobrina, Mrs. Peggy Payne, tras la muerte de Mr. Phizacklea. Cuando falleció Mrs. Payne, fue cedido de nuevo a otro miembro de la familia: Mrs. Hilary Hughes.

El criadero Pewcroft, propiedad de Mr. Stanley O\’Neill, también se lleva el mérito por haber conservado y salvado a esta raza. Durante el declive en número de los Flat-Coated Retriever, las muertes de perros debidas al moquillo y a las enfermedades era galopante. O\’- Neill estudió las líneas y los pedigrees y escribió mucho acerca de la raza, compartiendo de buena gana sus conocimientos con otros criadores y aspirantes a propietarios. Se dio cuenta de que el número tan limitado de Flat-Coated Retriever obligaba, para salvar a la raza, a utilizar todos los animales reproductores, incluso aunque su calidad no fuera muy buena y que la cría con los objetivos del tipo y la calidad tendría que posponerse. Su hembra fundadora, Pewcroft Pest, y su hija Pewcroft Peg, parieron las tres camadas que proporcionaron animales para los futuros criaderos. Entre estos perros se encontraban Ch. Pewcroft Plug y Pewcroft Pitch, Pewcroft Page, Claverdon Pewcroft Pieman, Ch. Pewcroft Picture y Pewcroft Peep, Pewcroft Proper, Pewcroft Prim, Pewcroft Praetor y Pewcroft Perfect.

La característica más importante que distingue al Flat-Coated Retriever del resto de razas de perros cobradores, y que sigue diferenciándolo del resto de razas, es la dedicación del criador por la conservación de las habilidades de trabajo. Al contrario que el resto de los perros cobradores, esta raza todavía no se ha dividido en dos líneas completamente diferentes (los criados para los certámenes de belleza o por sus habilidades en el campo.) El Flat-Coated Retriever debería ser un trabajador incansable, servicial y obediente que sobresalga en la localización de las piezas de caza abatidas. Sólo los incansables esfuerzos de aquellos que aman a la raza conservarán su versatilidad como perro cobrador que disfruta y destaca en las disciplinas de trabajo en el campo, el rastreo, la obediencia, el Agility e ir a buscar y traer pelotas que le lanzamos.

Los avatares por los que ha pasado la raza, debidos a las más diversas causas, hacen más de agradecer los esfuerzos de los criadores encaminados a su conservación.

Apariencia General

El Flat-Coated Retriever es el más ligero de los Retrievers. Se distingue del resto por su cabeza alargada, un cráneo no muy ancho, las mandíbulas largas y fuertes y un stop poco acentuado. Es esbelto, fuerte, bien proporcionado, tiene unas orejas pequeñas pegadas a la cabeza y una cola corta y recta. Su pelo es denso, lacio, de textura fina y puede ser de color negro o hígado. Las patas y la cola tienen unos buenos flecos.

La raza marca unos estándares de 58 a 62 cm de altura a la cruz para machos 56 a 60 cm para hembras con un peso recomendado de 24 a 34 kg.

Se trata de perros con fuertes mandíbulas y hocico relativamente largo para permitir la captura de aves y de la caza de montaña. La forma de su cabeza es exclusiva de la raza y se describe como \»de una pieza\» con una parada mínima y una parte posterior del cráneo de aproximadamente la misma longitud que el hocico.

Los ojos almendrados de color castaño oscuro tienen una expresión inteligente y amigable. Las orejas son colgantes, relativamente pequeñas, se encuentran cerca de la cabeza. El occipital (hueso en la parte posterior del cráneo) no se acentúa (como en el set, por ejemplo) y la cabeza fluye suavemente en el cuello bien arqueado. La línea dorsal es fuerte, recta y de un largo moderado que continua en línea recta hasta la parte trasera. Son más ligeros y elegantes en apariencia que otras razas retriever.

El color del pelo es o hígado o negro sólido. Raras veces se ve un color de la capa de amarillo sólido, siendo una descalificación para el estándar de la raza en conformación pero no para otras actividades como el campo, agility o pruebas de obediencia. La capa única (no hay capa interna) es de longitud moderada, con pelo denso y brillante: lo ideal debe ser plano y recto, pero se permite una ligera ondulación y más pelo en la parte posterior de las patas, el pecho, debajo del cuerpo, cola y pies.

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